El jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, lanzó ayer, viernes, una clara advertencia a Israel al manifestar que la Unión Europea va a jugar un papel importante en la resolución del conflicto de Oriente Próximo con independencia de cuál sea la posición de Israel al respecto.

La crisis entre la UE e Israel se ha agravado esta semana después de que los Veinticinco votaran en bloque a favor de una resolución sobre el muro de la Asamblea General de la ONU que exige el cumplimiento del dictamen que a principios de julio aprobó el Tribunal Internacional de Justicia de la Haya.

Las relaciones entre la UE e Israel nunca han sido muy buenas debido a que los europeos mantienen que se han de cumplir las resoluciones internacionales, algo que rechaza Israel. «Los dictámenes del Tribunal de la Haya se han de cumplir», insistió Solana en varias ocasiones.

La actitud europea en la cuestión del muro de Cisjordania, que Israel sigue construyendo como si nada hubiera pasado, ha sentado muy mal en este país. Para protestar por el voto de la UE en Nueva York, las autoridades israelíes decidieron que iban a recibir a Solana «con frialdad» durante la visita de dos días que terminó ayer.

«Europa es una potencia internacional muy importante y va a jugar un papel (en el conflicto) os guste o no», declaró Solana tras entrevistarse con el líder laborista Shimon Peres. El jefe de la diplomacia europea añadió que la UE tiene grandes intereses en la región y es natural que quiera defenderlos.

Eco en los palestinos

Sus declaraciones enseguida encontraron eco en los palestinos. El ministro Saeb Erekat apuntó que «los palestinos no pueden imaginar un proceso de paz sin una participación completa de la UE» debido a la «enorme contribución» de los europeos desde siempre.

Por el contrario, los israelíes sólo aceptan la mediación de Estados Unidos debido a que la superpotencia defiende en todos los foros los intereses de Israel. La comunidad judía tiene en Estados Unidos un poder político enorme y la administración de ese país nunca ha actuado en contra de los intereses israelíes.

Durante su visita, Solana ha insistido una y otra vez en que Israel tiene derecho a defenderse pero al mismo tiempo ha reiterado que el muro de Cisjordania es ilegal, coincidiendo en este punto con el dictamen del Tribunal de la Haya.

Solana no se opone a la construcción de una barrera que impida la infiltración de comandos palestinos con la intención de cometer atentados en Israel, pero si que se opone a que la barrera se construya en los territorios ocupados.

«La valla ha salvado muchas vidas, pero también las hubiera salvado si se hubiera construido dentro de Israel», ha manifestado repetidamente el representante de la política exterior europea.

En medios diplomáticos europeos se indicó que la UE debería pasar a la acción si quiere que Israel la tenga en cuenta, sin descartar la adopción de sanciones que obliguen a los israelíes a cumplir de una vez las resoluciones internacionales.

Solana, que no visitó los territorios ocupados para no molestar a Israel, comentó que la UE se replanteará su actitud respecto a Yaser Arafat si el primer ministro Abu Ala se ve forzado a dimitir. En los territorios palestinos ayer se alzaron voces que exigen que se juzgue a los dirigentes que han caído en la corrupción.

Rechazo a una retirada

Israel ha rechazado una propuesta de las fuerzas de seguridad palestinas para que retire sus fuerzas del norte de la franja de Gaza, a cambio de que agentes de la ANP impidan el lanzamiento de cohetes Qasam contra la ciudad de Sderot.

La propuesta fue hecha por el comandante de las fuerzas de seguridad palestinas en Gaza y Cisjordania, el general Abdel Razek Al-Mayaida, quien contactó estos últimos días con altos mandos israelíes, entre ellos el comandante en jefe de la Región Militar Sur del Ejército, para proponerle que sus hombres se hagan cargo de seguridad en esa zona, a fin de que el Ejército retire sus fuerzas y den un alivio a la población israelí.