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| La Unión Europea guarda silencio ante petición de Bush sobre Arafat |
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| Fuente: Reuters |
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 El jefe de Política Exterior de la Unión Europea, Javier Solana, elogió el esperado discurso del presidente estadounidense George W. Bush sobre su plan para el Oriente Medio, y dijo que fue una señal del "compromiso renovado" de Washington.
En un comunicado, Solana dijo que la UE comparte el objetivo de Bush de dos Estados (Palestina e Israel), viviendo en paz y con seguridad.
Sin embargo, Solana no apoyó la idea expresada por Bush de cambiar a la dirigencia palestina (Yasser Arafat), por lo que se abstuvo intencionalmente de mencionar al líder palestino por su nombre.
Bush planteó con claridad que ha descartado totalmente a Arafat como parte de un acuerdo de paz en Oriente Medio, al decir que los palestinos deben escoger a nuevos dirigentes "no comprometidos con el terror" para poder fundar su Estado junto a Israel.
A pesar de la idea estadounidense de cambiar a la dirigencia palestina, los 15 países que conforman el bloque de la UE están detrás de Arafat, de quien aseguran es el "legítimo representante del pueblo palestino".
Gran Bretaña dijo el martes que es el pueblo palestino es el que debe decidir si cambia o no a sus líderes.
El primer ministro británico, Tony Blair, dijo el martes que él ha estado "hombro con hombro" junto a Bush desde los ataques del 11 de septiembre a Estados Unidos y que apoya su lucha contra el terrorismo.
Sin embargo, un portavoz de Blair dijo que "Gran Bretaña siempre ha dicho que es el pueblo palestino el que debe decidir si cambia o no a sus líderes".
Analistas políticos dijeron que las palabras de Bush podrían dar al primer ministro israelí, Ariel Sharon, quien ha cabildeado intensamente por el apoyo de Bush para desplazar a Arafat, luz verde para seguir adelante con su campaña militar en Cisjordania después de una serie de atentados suicidas contra israelíes.
Bush esbozó el lunes su plan para la paz en Oriente Medio y reprendió duramente a Arafat al decir que los palestinos deben escoger nuevos líderes que "no estén comprometidos con el terrorismo" si quieren alcanzar un Estado junto a Israel.
Al presentar su largamente esperado plan, que había sido demorado por un recrudecimiento de la violencia en la región, Bush también exhortó a Israel a congelar la construcción de asentamientos judíos en los territorios donde los palestinos combaten la ocupación, para hacer posible una paz duradera.
Funcionarios palestinos de alto rango rechazaron toda demanda de que Arafat abandone el cargo. El líder palestino, por su parte, dijo que Bush hizo "una seria contribución" a los esfuerzos de paz, pero reiteró que "es el pueblo palestino quien debe decidir sobre su liderazgo".
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